(Crónica de Cegatito de San Bernardo)

Pamplona (Navarra, España), 25 de junio de 2010. Me resulta difícil explicar con palabras o con ovíparos las sensaciones vividas esta tarde en la Plaza de Toros Monumental de Huarte, que se encontraba abarrotada para presenciar la actuación de Revillita y su cuadrilla. El maestro ha estado sensacional de principio a fin, exprimiendo la embestida de sus toros y logrando momentos de belleza insuperable. Lo mismo que Niño Barrabás, pletórico de facultades en todos los tercios y cada vez más inspirado en los remates de las series. También brillaron a gran altura El Impasible, un diestro con afición sobrada para seguir avanzando en la profesión y Frascuelo, siempre artista en su quehacer capotero. Y como siempre, ahí estuvo Expertillo, enorme y garboso en sus intervenciones. Incluso Melgibson, que no toreó porque se lo había prohibido el veterinario, estuvo perfecto aconsejando a los lidiadores desde la barrera. En resumen, una tarde gloriosa que pasará a los anales de la Fiesta Nacional. O igual no.